La nueva Escuela de Molco Alto, en la comuna de Villarrica, vivió otro paso más en la concreción de su nuevo edificio, el que ya conoce su diseño y el que fue presentado en sociedad en una segunda Participación Ciudadana, reunión que estuvo liderada por el alcalde de la comuna lacustre, Germán Vergara, junto a los profesores del establecimiento, padres, apoderados y asistentes.
Además, de la nueva infraestructura, expuesta por la Consultora Ango y supervisada por el Ministerio de Obras Públicas (MOP), se expuso el reformulado Proyecto de Educación Básica de este recinto ubicado en el sector nororiente de la urbe villarricense, en un sector rural ampliamente poblado, en el camino Segunda Faja, paralelo al trazado que une a Villarrica con Pucón.
“Ésta es una de las últimas etapas del diseño y es importante, porque éste es el trabajo que estamos haciendo en la Municipalidad en educación, un proyecto innovador”, explicó el alcalde Germán Vergara, destacando que se dispondrá de espacios -entre otros- para el aprendizaje de cultivos agrícolas. “Por eso es de gran importancia darle a los apoderados y padres que éste es un proyecto innovador”, recalcó el jefe comunal, quien subrayó que, con esta segunda Participación Ciudadana junto a la comunidad, “de ahí vendrá una tercera Participación para ir a conseguir los recursos y que este proyecto se haga realidad en el mediano plazo”.
PROYECTO INNOVADOR
La infraestructura contempla mil 222 metros cuadrados construidos en dos niveles, tecnología de ahorro energético y de calefacción limpia con el medioambiente, para un máximo de 125 alumnos, quienes dispondrán de amplios y funcionales espacios.
Dominique Siddi, presidenta del Centro de Padres de la Escuela Molco Alto, reconoció que el proyecto “es algo que ha costado harto y ahora que vemos estos avances nos genera una alegría enorme. Yo tengo un hijo en cuarto básico y una hija en primero, por eso espero que el hijo pueda estar un año en la nueva escuela. Antes daba pena traer a los niños acá, porque estaba en paupérrimas condiciones”.
EXIGENCIAS ESPECÍFICAS
Patricio Echeverría, coordinador del proyecto, reconoció las dificultades especiales con las que han tenido que lidiar al momento de cristalizar esta iniciativa educativa, puesto que “nos solicitaron ir más allá de un programa arquitectónico simple, de cumplir simplemente con los metros cuadrados, sino que el espacio interactúe con el alumno” y que es a lo que se llegó y se expuso del recientemente expuesto diseño.
Al respecto, Paulina Hering, subdirectora de la Escuela Molco Alto, reconoció que “el edificio es la cáscara, pero lo que va a pasar adentro se busca que sea distinto y se hagan cosas distintas y que en cada uno de los espacios haya la posibilidad de aprender, lo que no es adquirir conocimientos, sino tener relación con otros, aprender junto a otros y apropiarse de la cultura”, indicó la profesional, quien agregó que este proyecto “también tiene que ver con entender que vivo y soy parte de una sociedad”, rubricó la segunda autoridad de la Escuela de Molco Alto, liderada por su director, Jorge Villagrán Sáez.